Año: 2016
Sello: Chaos Records.
País de origen: México.
A principios de los 90's un amigo mío, al cual no veo hace mucho tiempo, me pasó una lista de bandas mexicanas que practicaban ese estilo extremo que reinaba en el mundo entero, en aquel momento, y que era/es conocido como Death Metal. Por aquel entonces, yo estaba loco por dicho género, y es al día de hoy que sigo enamorado del Death Metal. Yendo específicamente a la lista en cuestión, en la misma figuraban bandas como Cenotaph, The Chasm, Mortuary, Blackthorn y Bloodsoaked. Descartemos a los legendarios Transmetal, a quienes ya conocía. Bien, de la lista yo sólo logré escuchar a las tres primeras bandas en tiempo y forma, o sea, en los 90's, mientras que a las otras dos (Blackthorn y Bloodsoaked) pude escucharlas recién cuando llegó el siglo 21 y sus facilidades para acceder a la música de miles y miles de bandas. Da la casualidad de que el sello Chaos Records, para quienes ya hice algunas reseñas, lanzaron el primer disco de Blackthorn, el único disco full hasta la fecha, y lo hicieron el año pasado.
"The Rotten Ways..." fue lanzado originalmente en 1992 por el sello Avanzada Metálica, dos años antes de que Blackthorn se separasen por primera vez. En 2014, o sea 20 años después de su separación, los mexicanos liderados por Armando Mondragón volvieron al ruedo, y ello supuso un motivo de celebración que fue coronado con la reedición del único opus larga duración que la banda de Ciudad de México hizo hasta la fecha. Dicho álbum es una simple pero honesta demostración de Death Metal de principios de los 90s, claramente influenciados por el viejo Death (sobre todo en la voz), Asphyx, mucho Thrash aquí y allá (los machaques tienen fuertes visos con el Thrash Metal de bandas como Morbid Saint y salvajadas por el estilo), Possessed, y claro está, la rudeza propia de las bandas mexicanas, país que siempre se ha caracterizado por tener bandas muy puras. Tan puras, que a veces se van de mambo con todo ese tema de lo trve.
Homogéneo y visceral, el disco consta de 11 pistas, las nueve que integran la placa, más dos canciones regrabadas en 2016 con la nueva formación, mostrando, de paso, las diferencias en cuestión de sonido entre aquel Blackthorn y el actual. Obvio, el viejo Blackthorn era más crudo, primitivo y urgente, como si tuvieran un mundo por descubrir ante sus ojos. Hoy, la banda suena más poderosa y profesional, y estas canciones lo dejan al descubierto. Sin embargo, no hay que minimizar a una etapa por elogiar a otra. Blackthorn, en sus comienzos, eran una banda muy honesta y salvaje, sin muchas ideas, pero yendo al frente en todo momento. Hoy suenan mejor producidos y hasta son evidentes las diferencias en las ejecuciones (indudablemente, Mondragón es hoy mejor instrumentista que en los 90s). Mas, el material más viejo original exuda sinceridad, y eso hace que uno deba valorarlo y recomendarlo sin dudarlo dos veces.
No será un disco seminal, ni será una pieza maestra de colección para los fans del Death Metal de todo el mundo. Pero, vamos, que entretiene y mucho esta re-edición del, hasta ahora, único disco full del combo mexicano.
Bandcamp
Chaos Records
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