lunes, 5 de septiembre de 2016

Within Destruction - Void


Año: 2016
Sello: Rising Nemesis Records
País de origen: Eslovenia

Es hora de dividir las aguas y comprender que la existencia de una nueva escuela de bandas extremas es una necesidad. Yo también soy fan de bandas como Autopsy, Bolt Thrower, Incantation, Possessed y el Swedish Death Metal de Estocolmo, crecí escuchando a todas y cada una de esas bandas y escenas. Pero ya no estamos en 1991, ya no estamos en los comienzos de la década de los 90's y los Morrisound y su sonido tan singular han quedado muy atrás. De hecho, ya no estamos en el siglo XX, estamos en el siglo XXI, y una renovación es algo vital para que todo este maravilloso submundo que es el underground siga viviendo por muchos años más. Es por eso que creo que la vieja guardia debe desistir de seguir atacando a aquellos que toman la determinación de marcar diferencias entre una era y otra. Y esas diferencias deben ser remarcadas y potenciadas, deben ser herramientas que muestren las fotografías de dos tiempos distintos, pero dentro de un mismo universo.
Bandas como Meshuggah, Decapitated, Cattle Decapitation, entre otros, han marcado un camino lleno de frescura y acorde a los tiempos que corren. Abrieron brechas entre generaciones de extremistas, dividieron la cuestión y está bien que así sea; no es, ni debe ser lo mismo, el Death Metal del siglo XX que el Death Metal del siglo XXI. Bandas como Within Destruction demuestran haber aprendido la lección a la perfección, y su segundo disco (sucesor del debut titulado "From the Depths") es una clara y portentosa demostración de ello.
Ubicados dentro del costado del Deathcore que más me gusta, el Beatdown, estos eslovenos se mueven dentro de una subdivisión de una subdivisión, y lo hacen con mucha clase y ferocidad. Además, han logrado un sonido acorde a la propuesta del grupo: lleno de brillo, moderno, hi-fi hasta la médula y aprovechando cada una de las (nuevas) herramientas de grabación y de producción de sonidos que el mundo digital les ofrece. Así nos encontramos con un grupo que suena muy pesado (¿guitarras de 8 cuerdas?), actual y algo inhumano, aspecto que es inherente a la frialdad que obtienen manipulando los efectos sonoros a los cuales echan mano.
Lo mejor del disco está en esos rebajes monstruosos que reciben el nombre de Beatdown o Down Tempo, y que provienen del lado más oscuro del Hardcore actual. Pero, básicamente, Within Destruction es una banda de Death Metal modelo siglo XXI, o Deathcore muy denso y mala leche, como prefieran clasificarlos. Junto a esos rebajes hay riffs monolíticos, armonías futuristas, una batería que parece una máquina (triggers y clicks todo el tiempo), sumado al vozarrón de Rok Rupnik; todo bien amalgamado. Por cierto, en algunos pasajes del disco Rok cuenta con colaboradores más que reputados: Dean Lamb de Archspire en "Plague of Immortality" (uno de los mejores momentos del disco), Adam Warren de Oceano en "An Unforeseeable Anomaly" (otro de los puntos altos del disco) y Jamie Hanks de I Declare War en "The Wrath of Kezziah".
Aires apocalípticos provenientes de un futuro inmediato, subgraves que empujan al oyente a agudizar su oído para descubrir capas y capas de sonidos moviéndose bajo tierra, y un grupo de 4 jóvenes talentosos y enojados que están dispuestos a demostrar que no todo tiempo fue mejor. Yo, con mis 42 años a cuesta, sigo siendo un eterno enamorado del viejo y querido Death Metal; pero ello no me impide disfrutar de éste tipo de aportes novedosos y absolutamente diferentes a todo lo que se haya hecho en los viejos tiempos.

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TOMetal

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