Año: 2016
Sellos: Espiral DIY / Esxs Malditxs Punks / Desprecio DIY / Bombas de Odio / Eskaramuza Distro / Mochila Records / Asociación Ilícita.
País de origen: Chile y Perú, respectivamente.
En la portada hay una etiqueta que resume lo que éste Split EP: 10 tracks DisPunk Attack. Resumen y mensaje más que claro para que a nadie le queden dudas acerca del contenido del disco. D-Beat, Raw Punk, sucio, vertiginoso, violento y lleno de odio. 2 bandas que siguen sendas similares, pero con ciertas diferencias que ya voy a explicar en la review.
El disco comienza con unos viejos conocidos nuestros, los chilenos de Bömbärdeo, hijos dilectos de glorias como Discharge y Disaster, con el ritmo típico del D-Beat retumbando una y otra vez, la voz rabiosa esgrimiendo urgencias y denuncias anti-sistema hasta quedarse con las cuerdas vocales destrozadas y un conjunto que, en líneas generales, suena cada vez más ensamblado. Hay mucho del sonido UK '82, con algunos detalles que me recuerdan a The Exploited (en particular la voz). No dan un puto respiro, literalmente tiran a matar y no se guardan a nada, algo que ya me esperaba. Digo, estoy hablando de una de las bandas que mejor representa al D-Beat en esta parte del Globo terráqueo. La única objeción que puedo hacer es que el sonido es demasiado crudo, detalle que me hace pensar en lo siguiente: Bömbärdeo, con una producción un poco más ajustada, estarían en Europa destrozando cráneos hoy mismo. Son una topadora y mejorar ese detalle les serviría para convertirse en una banda de temer a nivel internacional. Les sobra garra y tienen buenas ideas. Como siempre, pulgares arriba para ellos.
D.H.K. suenan más crudos aun, más sucios y saturados, aunque mantienen la misma línea compositiva. Diferencias con sus compañeros de split se encuentran en el sonido del bajo (muy al frente), una batería que queda en segundo plano y resta ferocidad y explosión a los ritmos, una guitarra tocada correctamente (con un sonido realmente mugriento, digno de ésta clase de agrupaciones) y una voz furiosa pero no tan gutural como la de sus colegas chilenos. Me gusta lo de D.H.K., suena honesto y brutal, pero les falta mejorar en la forma de presentar su material pues hay instrumentos que tienden a tapar a otros, y eso hace que el bloque homogéneo e indestructible que sí o sí debe ser parte del sonido de una banda de D-Beat, ese sonido que es parte de la esencia del estilo, no esté presente, poniendo al grupo en una situación en la que resulta cuasi obligatorio mejorar en ese aspecto. Por lo demás, estos peruanos son una verdadera molotov sonora.
Sintetizando, estamos ante un buen split que, seguramente, será del agrado de los amantes del DisPunk, D-Beat o como mierda quieran llamarlo. Yo, que crecí escuchando a Discharge y demás, siempre estoy bien predispuesto para escuchar bandas como Bömbärdeo y D.H.K. De hecho, me encantaría tenerlo original.
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Bombardeo FB
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