lunes, 16 de mayo de 2016

Sick of Stupidity - One Shot, One Kill


Año: 2015
Sello: Rødel Records / Give Praise Records
País de origen: Holanda

Impactante debut discográfico de este cuarteto holandés, cultores de un Grindcore furiosos y con muchos arrebatos de Power Violence impiadoso. O sea, es de esa clase de Grindcore que indudablemente tiene sus deudas con el viejo Napalm Death, pero que se encuentra mucho más cerca de bandas como Wormrot, Pretty Little Flower e incluso los ya separados Jesus Crøst. De hecho, acá hay ex miembros de esta banda, como así también hay ex- músicos de bandas como Kugra y Gewoon Fuckin Raggen. En otras palabras, gente experimentada en esto de tocar rápido y brutal. La banda se formó a principios del año pasado e inmediatamente salieron a petar culos con éste, el primer y único registro sonoro de la banda de Rotterdam hasta la fecha. ¡Y vaya registro!
Blast Beats tocados con toda la furia, pero con una precisión que mete miedo. Voces que se contrastan y atacan mutuamente, pasando del growl al grito ensordecedor si dar un sólo instante de respiro. Una guitarra que atropella con riffs ejecutados como si cada nota fuera parte de un racimo de bombas. Un sonido filoso, cortante y extremo hasta la médula. Canciones breves y plagadas de buenas ideas. O sea, Grindcore, con toques de Power Violence en muchos momentos, pero Grindcore, así de simple. Y del mejor, del que más me gusta, del más furioso.
En "One Shot, One Kill" (nada que ver con la canción de Dying Fetus) hay tanto de tradición como de modernidad, y eso se puede comprobar en todos los aspectos. Veamos, estos holandeses han crecido escuchando a los pioneros del estilo y eso se nota. Pero también tienen sus vistas y oídos puestos en el presente, por lo que han entendido y aprendido a combinar lo mejor del Grindcore de ambas épocas. Pueden arrebatar al oyente con partes lentas o a medio-tempo, dignas del Napalm Death de los tiempos de "Scum", como así también pueden hacer alarde de una precisión instrumental más propia de los tiempos actuales que del viejo Grindcore de los 80s. Y del sonido podemos decir lo mismo, pues así como suenan sucios y caóticos, también hay fidelidad y contundencia propias de una buena producción moderna.
Grabado, mezclado y masterizado por Role en Tonmesterei, este primer disparo del grupo holandés tiene grandes momentos, y esos momentos son "Anno Domini", con ese riff entrecortado que es sostenido por un ritmo de batería a mitad de camino entre la cabalgata y el blast beat, y "Social Alienation" y la destructiva impronta alienante (valga la redundancia) de la que hacen gala. Eso sí, los otros 9 tracks que componen la placa son igual de asesinos que estos dos que cité un poco más arriba. Es por eso que "One Shot, One Kill" es un gran disco en su totalidad. Tan bueno, que lamento no haberlo escuchado antes. Seguramente lo hubiera puesto entre mis favoritos del 2015.

Bandcamp
Facebook
Give Praise
Grand Sounds

No hay comentarios: