miércoles, 2 de diciembre de 2015

Wicked Inquisition - Idem


Año: 2015
Sello: Tridoid Records
País de origen: USA

Apenas vi la portada del disco debut de Wicked Inquisition pensé en un nombre, una leyenda del Doom Metal: Trouble. Ok, el dibujo que vemos en dicha portada puede resultar familiar y ser comparado con muchas tapas de discos de Psicodelia, Stoner, Doom y Heavy Metal de finales de los 60s (Blue cheer, por ejemplo). Pero, tal vez por el logo de la banda, el nombre de los geniales creadores de "The Skull" vino a mi mente como por arte de magia. Y no me equivoqué: Wicked Inquisition están claramente influenciados por la otrora banda de Erick Wagner. Es que el cuarteto oriundo de Minnesota tiene un sonido similar, usan estructuras compositivas comparables a Trouble (me refiero puntualmente a las estructuras, no a la calidad del material), y hasta algunos aspectos en lo lírico, tal vez. Pero, a medida que avanza el disco nos damos cuenta de que las influencias, en líneas generales, provienen del Doom Metal más tradicional, apareciendo en la lista de influencias nombres tales como Saint Vitus, The Obsessed (Nate Towle, cantante/guitarrista, tiene un registro vocal que recuerda a Wino, pero sin la magia de este último), Witchfinder General, Pentagram, etc. O sea, Heavy Metal tocado de manera lenta, pero con ese aura maléfica y olor a caucho quemado en la ruta.
A diferencia de lo que pueda sugerir la imagen de portada, Wicked Inquisition no se suben al carro de la Psicodelia tan en boga en el mundo del Stoner y el Doom hoy (ya saben, esa vertiente que hoy se conoce como Heavy Pysch). Todo lo opuesto, lo de esta banda es bastante terrenal, no faltan composiciones que remiten al viejo Black Sabbath, algo bastante obvio, mantienen esa cosa religiosa que combina a la perfección con el estilo y...nada más. No hay grandes canciones ni hay momentos malos. El debut de la banda es parejo, bien tocado y bien grabado, pero carece de momentos trascendentes. Incluso hasta me atrevo a decir que hay algunos momentos realmente intrascendentes. En otras palabra, "Wicked Inquisition" se deja escuchar sin objeciones, resulta agradable el oído (en particular "M.A.D", el momento más logrado del disco) y no mucho más que eso. No van a cambiar el rumbo de la historia, ni siquiera van a lograr ser reconocidos como una gran banda que rinde homenaje a los grupos mencionados anteriormente. Solamente te aseguran un instante agradable, punto y aparte.

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