Año: 2015
Sello: Apollyon Entertainment/UMG
País de origen: USA
El año pasado, este grupo lanzó un single llamado "I Am in Hell", del cual hice una review. Sin ser una pieza maestra, ese single despertó en mi el interés por un disco que, por aquel entonces, estaba en proceso de creación y grabación aun. Bien, hoy tengo el disco en mi poder, y tras haberlo escuchado varias veces, puedo decir que Vorzug son un grupo realmente interesante.
Brutales pero no a cualquier precio. Melódicos, pero no por ello voy a decir que hacen Melodic Death pues no es así. Complejos en su justa medida, sin pasarse de la línea que divide al Death Metal del Technical Death. Vorzug son amplios, poseen un registro compositivo variado y bien balanceado, y con eso les alcanza para hacer un disco debut que entretiene. Predominan los medio-tempos, pero buscan no estancarse en esos patrones rítmicos, se mueven. Son sencillos para componer riffs, pero agregan capas de arreglos que aportan matices y algo de profundidad. La voz de Anthony Hoyes es gutural, bien de ultratumba, pero tiene recursos, no queda en emitir growls y nada más que eso. El sonido es filoso, pero no saturan jamás, todo el tiempo se puede escuchar cada instrumentos en su lugar, se pueden apreciar los detalles y nada se superpone, cada cosa ocupa un lugar específico.
En la faz compositiva, pues básicamente hacen Death Metal en el cual encontramos todas las cualidades antes mencionadas. Pero hay toques thrashers por aquí y por allá, emergiendo la influencia de Slayer en algunos pasajes (sobre todo en los ritmos a medio-tempo e incluso en los pasajes más lentos); "The Howling" (junto a "Slumber Party Massacre", una canción morbosa que me recuerda a Necrophagia), mi canción favorita del disco, es una prueba de ello. Incluso, hasta hay algún arrebato blacker por allí, como sucede con "At Winters End", el track con el cual comienza el disco. Pero, y más allá de tomar cosas de otros estilos, Vorzug tocan Death Metal y lo hacen bien. No deslumbran, pero cumplen con hacer lo suyo de la manera más sincera posible.
Cabe acotar que estos tipos cuentan con experiencia en el underground, o sea, no son ningunos novatos, acá no hay improvisados. Se les nota la pericia para hacer lo que quieren hacer, se evidente que saben qué quieren hacer, y lo hacen. Quizá les falte explosión, esa visceralidad acojonante que hace que el Death Metal sea la música más brutal del Planeta. Vorzug suenan prolijos y ajustados, algo que es una virtud a todas luces si tenemos en cuenta el estilo del grupo. Pero meter un mayor grado de violencia sonora no les vendría nada mal. Mas eso es un detalle que no logra empañar lo hecho por estos norteamericanos en su primer full lenght. Entretenido, muy entretenido.
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