Año: 2015
Sello: Pathologycally Explicit Recordings
País de origen: Italia
Tras la disolución de Brodequin (para quienes no los conocen, les comento que se trata de una de las bandas más extremas que jamás hayan existido), mi mente empezó a buscar nombres que pudieran ocupar el vacío dejado por la estremecedora banda norteamericana de Brutal Death. Entre esos nombres, apareció el de Bowel Stew como una posible alternativa al momento de escuchar algo que, aunque sea un poco, se acercase al nivel de violencia infernal desplegado por Brodequin. No digo a nivel calidad pues los padres de "Instrument of Torture", además de ser unos bestias hijos de puta, grabaron discos memorables. Pero sí conseguir alguna banda que pudiera ser comparada en cuanto a la ferocidad. Y, repito, estos italianos estaban en dicha lista imaginaria. Pues bien, tras 5 años sin lanzar un disco full ( de hecho, este es el tercero en 16 años de carrera), Bowel Stew vuelven al ruedo, y lo hacen con un disco que confirma mi presnción: si hay un grupo que puede llenar -en parte- el vació dejado por Brodequin, esa banda es Bowel Stew.
"Debridement" es lo que vemos en la portada: una carnicería humana. Una sanguinaria exhibición de brutalidad irracional y desmedida. Una cátedra sobre cómo tocar Brutal Death en su más pura expresión. Un disco descarnado, desollador, asesino. Un discazo, en otras palabras. "Debridement" es un disco crudo y breve (apenas 25:32 minutos de duración), detalle este último que refuerza la sensación de locura violenta, ese raid de muertes bestiales llevadas a cabo en poco tiempo, y con la mayor ferocidad posible. Y la forma en que fue grabado dice mucho al respecto. Las baterías fueron grabadas en 4 horas, las guitarras y bajos fueron grabadas en 7 horas, y las voces en tan solo 2 horas. O sea, entraron al estudio, y con la fuerza y velocidad de un tornado, dejaron todo registrado para que nosotros suframos ataques de epilepsia, vómitos y delirios criminales mientras escuchamos esta guarrada.
Un sonido sucio, viscoso, ruidoso hasta decir basta, es lo que da el marco ideal a este opus horroroso hasta la exasperación. Por cierto, la producción corrió por cuenta de la misma banda, en colaboración con Angel Raffaele de Inocentiis, detalle para nada menor pues sirve para corroborar que estos tipos no sólo que están muy locos, sino que, además, la tienen muy clara. Y eso sale a la luz si comparamos a este tercer full lenght con sus anteriores trabajos. Han evolucionado como banda, suenan más firmes y compactos, pero el estilo, el sonido y el espíritu vicioso están intactos, como si nada hubiese cambiado. En otras palabras, fieles a sí mismos hasta la muerte.
Previamente hablé de Brodequin, y no es casual que así lo haya hecho. Mi track favorito del disco es ¡oh casualidad! un cover de Brodequin: "Hollow", en una versión francamente INHUMANA, tal como debe ser. Bueno, sí, el disco entero es inhumano. "Debridement" es un compendio de atrocidades convertidas en ¿música? Muchos dirán que esto no es música. La verdad es que me importa bien poco lo que importan los detractores del Brutal Death Metal. Y, por suerte, a los Bowel Stew tampoco parece importarles lo que opinan esas personas. O tal vez sí les importa, y crean esta avalancha de brutalidad demencial para ofender a todos esos mojigatos. Cómo sea, me encanta esta banda y me encanta este disco.
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