Año: 2015
Sello: Autoproducido/Independiente
País de origen: Francia
El concepto de one man band es algo que la mayoría asociamos con el Black Metal. Al menos en mi caso, tiendo a establecer esa relación. Pero, en este caso, si bien estamos ante una banda de un solo hombre, esa banda es de Southern Metal. Por suerte para mí, no es una copia del insoportable de Zakk Wylde y su Black Label Society de mierda (disculpen los fans de Wylde, pero no lo soporto). Quizá influya el hecho de ser francés, quién sabe. La cuestión es que Arno Bechet (el hombre orquesta en cuestión) se las arregla bastante bien para hacer un disco que, como mínimo, es decente.
Eso sí, el comienzo no podría ser peor. El tema que da nombre al disco es de lo más común e intrascendente que uno pueda esperar, con riffs y líneas vocales archi-conocidas, repetidas hasta el cansancio por cientos de bandas del mismo estilo. Con un comienzo así, todo hace presuponer que la cosa va a ir por mal camino. Encima de eso, el tema que sigue ("Burn Into Eternity") no levanta la puntería. Juro que pensé que estaba ante un mal disco. Pero no, no lo es. De hecho, a partir del tercer track las cosas cambian radicalmente, levantando la calidad de la música ostensiblemente.
No es que de repente "Raised in blood" pase de ser un disco mediocre a ser un gran disco, pero cambia, y para bien. Es decir, salvo en una canción puntual ("La Marche des Morts", un blues cantado en francés que es, lejos, lo mejor del disco), la mayoría del material incluido aquí es aceptable y punto. Pero, en comparación con el comienzo del disco, "Raised in Blood" repunta, de eso no tengo dudas.
Lo que sí me genera preguntas es el hecho de que, cuando Arno se tira para el lado del Blues con sonido Heavy, todo mejora, todo parece acomodarse. Sin embargo, cuando decide apegarse al formato convencional del estilo que practica en la mayor parte del material, tiende a hacer agua. Repito, sus composiciones son decentes, pero no pasan de eso (salvo el blues ya mencionado). Por lo que debo preguntarme, y preguntarle al bueno de Arno, si no está errando el camino. Digo, es tan sólo una pregunta, pero que nunca está de más plantearla.
Nada mal, el disco en sí no está nada mal. Arno es un buen instrumentista. Pero debe mejorar como compositor. Yo creo que tiene capacidad suficiente como para hacerlo.
Bandcamp
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