sábado, 23 de mayo de 2015

Velvet Six - Demons Las Divas


Año: 2015
Sello: Inverse Records
País de origen: Finlandia

Quienes siguen este blog saben que estilos como el Death Metal, Black Metal, Doom, Thrash, y especialmente el Crust y el Grind, están entre mis favoritos. Pero ni aunque fueran los últimos estilos musicales sobre la Tierra me pasaría el día entero escuchando ese tipo de música. Siempre he disfrutado de una amplia gama de estilos, y el Gothic Metal que hacen estos finlandeses está dentro de lo que me gusta escuchar. Sucede que soy fan de Sisters Of Mercy, me encanta Sentenced en su etapa más melódica y depresiva, admiro a Billy Idol (sobre todo sus primeros discos) y siempre me han gustado bandas como The Mission. Y da la casualidad de que Velvet Six son una exquisita combinación entre todos esos artistas mencionados antes, pero con una personalidad arrolladora. Es por eso que este segundo disco de Velvet Six me encanta, lisa y llanamente me encanta. Arrogante, sensual, profundo, sincero, poderoso y lleno de melodías inolvidables, "Demons Las Divas" seduce y convierte al oyente en un actor más dentro de la historia que relatan a lo largo del disco.
"Demons Las Divas" es una historia que abarca todo el disco, y que habla acerca de los Demonios y las Divas que, según los integrantes de la banda, afectan a nuestras vidas a diario. No sé si es creíble o no la historia, pero dentro del marco en el que está contada, con la música del grupo atrapando de principio a fin, y con la calidad que tienen estos tipos, es imposible no creerles; aunque sea mintiéndome de manera consciente, convenciéndome de que la historia habla sobre cosas reales, da igual, pues la música es tan sexy, tan endemoniadamente sexy, que me resulta irresistible. Los teclados, lo más gótico del disco en cuanto a sonido (a cargo de Miro Kronqvist), juegan un rol esencial en la creación de las atmósferas, aportando "colchones" sonoros que maquillan el sonido del grupo con tonos diversos, dependiendo de la canción. La dupla de guitarras (los responsables son Richard Vikman y Christoffer Solborg) no es brillante, pero los tipos rockean, ponen las bolas en donde hay que ponerlas, se prenden fuego. La base rítmica es tan sólida como contundente, pero fluida, no es algo duro porque sí, sino que fluctúan entre la dureza y la sensualidad cuasi tribal (trabajo más que elogiable de Henrik Björkgård en batería y Matias Muotio en bajo). Mención especial para Olle Wallenius, un cantante lleno de buen gusto para elegir las melodías que interpreta, convincente porque hace que le creamos cuando canta, nos pone en su lugar al escucharlo, y porque tiene mucho feeling, además de ser dueño de una voz vampiresca, grave pero con una interesante variedad de timbres.
¿Quieren que les recomiende canciones? Miren, el disco en sí me parece una belleza, pero "Twist", "Something Evil", y en particular "Back To Back" (les juro que no puedo parar de escuchar esta canción. Es lisa y llanamente hermosa), son adictivas hasta convertir al oyente en un despojo humano capaz de repetirlas hasta el hartazgo. Y sí, el sonido es el ideal para este grupo, tan prístino como poderoso, tan oscuro como sensual. Qué más puedo decir, si ya me desviví en elogios. Los más trve los odiarán, probablemente. Da igual si eso sucede o no. Yo estoy hipnotizado por la música de Velvet Six.

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