Año: 2013
Sello.
Hellthrasher Productions
País de
origen: Suecia
Desde que
escuché The Return of Swedish Old School
Death Metal, el demo que A. Death lanzó en el 2010 bajo el nombre de
Putrified, supe que su banda iba a convertirse en una de mis Nuevos Grupos
Favoritos. Sin embargo, jamás estuve totalmente de acuerdo con decir que
Putrified es solamente Swedish Death Metal, pues las influencias del primer
Death (el de Scream Bloody Gore) y
Possessed son más que evidentes. En todo lo demás, nadie lo puede discutir:
Putrified es una de las bandas que mejor ha logrado capturar la esencia del
Swedish Death Metal de Entombed/Nihilist, de Grave, de Cemetary, de Dismember.
A. Death es el tipo que mejor entiende acerca de las atmósferas que este tipo
de música debe crear, de cómo debe sonar, de cómo debe tocarse este tipo de
Death Metal, y cual debe ser la actitud que se debe imponer en esta música. Lo
viene demostrando desde su primer demo, en todos y cada uno de sus trabajos. Y
hoy, con este nuevo Ep, no hace más que confirmarlo: Putrified es puro y
endemoniado Death Metal, sin aditivos ni experimentaciones vanguardistas, ni
coqueteos con ramificaciones como el Brutal Death, el Technical Death Metal o
cosas por el estilo. No, amigos, Putrified hace Death Metal sin rodeos,
aferrándose a todo aquello que hizo del Death Metal lo que siempre fue, lo que
siempre hemos amado: música insana, bestial y tenebrosa. Ya desde la Intro , A. Death deja en
claro que no va a hacer otra cosa que no sea lo que él ama hacer, que no va a
hacer concesiones de ninguna índole. Tras la intro hecha con esos teclados
fantasmagóricos, explota la canción que da nombre al Ep, y explotan nuestras
cabezas al mismo tiempo. Desde el primer acorde hasta el último, Putrified
desata una carnicería sonora digna de los comienzos de la historia del mejor
género que jamás haya parido el Heavy Metal: el Death Metal. La voz de A.
Death, similar a la de Becerra (Possessed) y el Schuldiner de los primeros
discos de Death, nos invita a ser parte de este sacrilego ritual, y uno,
maníaco del Death Metal, accede encantado. Siguen “Pestilentialis”,
“Sacrificial Death Salvation” y “This Poisoned Chalice”, y A. Death no sólo
demuestra que ha crecido sin perder de vista la esencia de su música, sino que
hasta se da el gusto de demostrar que, cuando quiere, puede ser melódico y no
perder ni malda, ni furia ni oscuridad en el intento. El penúltimo track,
llamado “Evocatio”, es un misil genocida teledirigido, que encuentra su
objetivo en el cerebro del oyente, al cual hace trizas. Para cuando llega
“Sacred Putrefaction”, la canción que cierra el Ep, nuestros cerebros están
prácticamente destrozados, los sesos esparcidos por todo el piso; mas A. Death
aniquila lo poco que queda de nosotros, y le pone fin a un Ep estupendo.
Putrified,
en su corta pero prolífica carrera, ha lanzado muy buenos trabajos.
“Sacrilegious Purification” no es un muy buen álbum: es excelente. Y lleva a la
siguiente pregunta: su próximo full lenght será como este Ep? O será superior?
Mientras esperamos la respuesta, sigamos blasfemando al ritmo de este
sacrilegio. 
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