Año: 2017
Sello: Iron Bonehead Productions (vinilo de 12", CD y digital) / MercyfulHell Productions (cassette)
País de origen: Grecia.
Dos grupos griegos en un split que hará las delicias de los fans del viejo y místico Black Metal helénico. Ya saben, si te gustan los más oscuros discos del Rotting Christ de los 90's, Varathron, Necromantia y todas esas leyendas del país de Socrates (el filósofo, no el jugador brasilero), pues deberían como mínimo pegarle unas cuántas escuchadas a éste split pues contiene todo lo que aquellos inoxidables discos transmitían, y aun hoy transmiten, a pesar del inexorable paso del tiempo.
El disco comienza con los atenienses de Funeral Storm, quienes comenzaron su carrera bajo el nombre de Raven Throne allá por el año 2001. Un año después, Wampyrion (líder y creador del grupo) rebautizó al grupo como Funeral Storm, y poco a poco, con separaciones de por medio -se separaron en el 2007, para volver cinco años después al ruedo-, fueron sacando a relucir su estilo, y por sobre todas las cosas, su capacidad para encararlo. Como imaginarán, acá sobran los teclados atmosféricos, llenos de melancolía y climas tenebrosos, de tinte vampiresco y sonidos noventosos. La guitarra combina agresividad con buenas melodías, tal como indica el manual del buen metalero extremo griego, mientras que la voz posee ese aura entre maléfica y ritualista que es tan común en las bandas blackers de dicho país.
Es imposible no pensar en las viejas glorias del Metal Extremo helénico mientras suenan las dos pistas que el grupo aportó para éste trabajo. Ya saben, si les copa el Black griego, Funeral Storm es una de esas bandas a las cuales uno puede calificar como de Esencia Pura.
Los ya desaparecidos Celestial Rite tienen casi las mismas características, aunque un poco más veloces y contantes en los tempos. A diferencia de sus colegas y compañeros de split, Celestial Rite (banda que se separó el año pasado, con casi 20 años de trayectoria sobre sus espaldas) no hacen uso de los cambios de ritmo ni apelan a los tempos épicos. Más directos y simplistas, preferían crear climas lúgubres, rodearlos con melodías de teclados sepulcrales y dotar a sus canciones de aires mefistofélicos, pero manteniendo un ritmo sostenido y veloz, aunque sin llegar jamás al blast beat.
Al igual que sus compañeros de álbum, Celestial Rite suenan (o sonaban) a banda griega en un 200%, con todo lo que eso implica. No eran la octava maravilla, pero cumplían y con creces.
Por ciertos, los tracks de Celestial Rite aparecen en el EP de 2014 titulado "Bearer of Dawn", y fueron grabados durante ese año, re-mezclados un año después, y masterizados nuevamente durante el 2015. Los tracks de Funeral Storm fueron grabados, mezclados y masterizados por su líder, quien además se hace cargo del bajo y la programación de la batería.
Helénicos hasta la médula, estas bandas han hecho un split altamente recomendable para los fans del estilo.
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Funeral Storm
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