Año: 2014
Sello: Independiente
País de origen: Polonia
El Post-Metal, vertiente musical que muchos toman como parte de la escena metalera, pero que yo, a modo meramente personal, considero como algo fuera de dicha escena. ¿Por qué? Porque el prefijo Post es excluyente para mí. Estamos ante algo que significa, en éste caso puntual, Después De; o sea, en el caso específico del Post Metal, o de cualquier género o subgénero musical, implica estar hablando de algo que viene después de tal o cual género. Moanna tocan Post Metal, por lo que no es justo decir que son una banda de Metal, sino una banda que toma elementos de la música de Metal para ir más allá del mismo, para crear algo que vendría a ser lo que viene después del Metal. Hecha la aclaración, que hace mucho venía cavilando, vayamos al primer disco full del quinteto de Bielsko-Biała.
Dramáticos, refinados y pesados en dosis cuasi iguales, Moanaa no aceleran nunca, no lo necesitan. La intensidad aquí proviene de otro lado, llega desde la distorsión como herramienta para explotar cual tormenta en medio de la noche más relajada. Y esa noche es, esencialmente, de una turbulencia ocasional y muy bien puesta en los momentos claves. Mas, en gran parte, el disco es de una tensa calma, de una sutil mezcla entre la paz y la guerra interna. Da la casualidad de que las líricas del grupo hablan, en un porcentaje bastante alto, de conflictos internos, por lo que es hasta obvio que la música transmita esa misma sensación.
En casi una hora, los polacos de Moanaa hacen uso, pero no abuso, de todos los clichés del género (pues el Post Metal es ya un género y no una división o subdivisión de otra cosa), pero no se privan de manipular elementos extraídos del Post Rock, especialmente con el uso de guitarras limpias que desgranan emotivas melodías, como si provinieran de un cielo prístino, de ensueño, algo que les queda de maravillas a estos muchachos. Sin embargo, lo mejor del grupo no llega cuando se entregan a las armonías emotivas-oníricas, ni cuando la rabia aparece en el horizonte, sino cuando dejan fluir ambos lados de la misma personalidad y los combinan magistralmente. Es por eso que mis dos canciones favoritas del disco son "Zero" y "Away", porque tienen lo mejor de las dos caras del grupo.
No es un disco grandioso éste primer disco full de Moanaa (la primera grabación es un EP llamado "Moanaa"), pero sí es convincente, creíble, real. No es un álbum que haya nacido para convertirse en una pieza esencial en la historia del género, pero sí es un disco agradable y recomendable como tal. Y es un preámbulo más que interesante, que le permite al oyente prepararse para adentrarse en la nueva obra del grupo, lanzada éste año y titulada "Passages", disco que reseñaré en breve. Mientras tanto, vayan prestándole atención a "Descent".
Bandcamp
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