lunes, 23 de noviembre de 2015

Abysmal Grief - Strange Rites of Evil



Año: 2015
Sello: Terror From Hell/Horror Records
País de origen: Italia

Lo hicieron de nuevo, estos jodidos hijos de puta lo hicieron de nuevo. ¿Cómo mierda hago para ser objetivo cuando una de mis bandas favoritas vuelve a crear una obra maestra? ¿Objetividad? Objetividad las pelotas. Abysmal Grief es hoy, ahora, una de las mejores bandas del Cosmos y me importa un carajo si alguien está en desacuerdo conmigo. Los amo, me declaro fan de estos italianos y no me avergüenza reconocerlo. Se supone que, en mi rol de crítico, debo mantener determinada postura, morigerado en mis comentario, analítico y cuidadoso en cuanto a los términos que uso para expresarme. Jódanse, no pienso ser cuidadoso en nada que se refiera a una de mis bandas favoritas. En serio, estos tipos vienen dando cátedra de cómo tocar Doom Metal macabro, diabólico, fúnebre hasta decir basta y cautivante como pocas veces se ha logrado en la historia, y lo vienen haciendo sin errar jamás, sin fallar jamás, desde hace casi 20 años. Desde aquel espectacular debut autotitulado, pasando por los Demos grabados en los comienzos del grupo, ese exquisito EP llamado "Mors Eleison", y la lista sigue; Abysmal Grief es una de esas bandas que nunca bajan de determinado nivel, y este nuevo opus no es la excepción a la regla.
Esto último queda claro apenas comienza el disco con esa oscura y excitante pieza llamada "Nomen Omen", con esos coros monásticos estremecedores que fortalecen la lúgubre melodía ejecutada por un teclado que parece salido de una película de la Hammer. Inmediatamente escupen el track que lleva el nombre del disco y la cosa se pone más oscura aun. Olor a muerte, a inciensos y velas negras ardiendo en un ritual de muerte, nadie puede describir tanta negrura como Abysmal Grief. Mas lo mejor es que lo hacen con tanta frescura, tan lejos de esa solemnidad exagerada y aburrida a la cual son propensos tantos grupos, que hasta resulta divertido sumergirse en los horrores creados por estos italianos. Lo que sigue no tiene desperdicio: 4 canciones que no hacen más que confirmar todo lo bueno mostrado en los dos primeros temas, incluyendo un excelso cover de Bedemon y un final apoteótico con "Dressed in Black Cloaks". Cada canción tiene la impronta inconfundible del grupo, esa personalidad única e inimitable que es la principal causa por la cual los adoro incondicionalmente.
¿Y qué decir de los integrantes? Todos entienden a la perfección su rol, son más que músicos tocando Doom Metal, son actores que llevan a cabo una ópera de música y teatro del horror como hacía mucho tiempo no se escuchaba/veía. Joder, no sé si todo esto que digo le importa a alguien o no. Sólo sé que hoy decidí aprovechar este espacio, mi espacio, para dejar salir todo lo que pienso y siento por esta banda. Nada más que eso. Ya me desahogué.

Website
Horror Records Bandcamp

2 comentarios:

Anónimo dijo...

estoy contigo, a la mierda la objetividad, son dioses y se la han vuelto a sacar, enorme álbum.

PURO RUIDO dijo...

Veo que nos entendemos. Saludos