martes, 29 de enero de 2013

Gored - Incinerate The Vanquished



Año: 2005
Sello: Forever Underground Records
País de origen: USA

¿Hace cuantos años que estos tipos están grabando su segundo álbum? Recuerdo haber entrado al website del grupo en el 2009, y haber leído que la grabación del mismo estaba en marcha. Estamos en el 2013 y el segundo disco aun sigue en etapa de gestación. Se ve que gustan de tomarse su tiempo los comandados por Daniel Valdez (guitarra, y, actualmente, guitarra y voz). En fin, al menos, en su momento, nos entregaron esta guarrada del más puro Brutal Death yanki, ese que siempre tiene deudas con el primer Pyrexia, con Suffocation (cuándo no), Deeds Of Flesh y similares. Ese que te deja gusto a azufre en la boca y un tremendo dolor de cuello por culpa de intentar seguir los ritmos trepidantes y los cortes frenéticos con la cabeza. Ojo, que Gored no es la octava maravilla ni mucho menos. Pero hacen esa clase de Brutal Death retorcido que tan bien les sale a los norteamericanos, y que siempre es bueno tener a mano cuando el cerebro pide algo brutal, realmente brutal. Por supuesto, de originalidad ni hablemos. Hay miles de bandas haciendo lo mismo, y con resultados más o menos similares. Pero el único disco full de los oriundos de San Antonio, Texas, siempre tuvo un no sé qué para mi. Será que lo agarré justo cuando el Brutal Death era lo que yo más escuchaba (entre el 2005 y el 2009 le di muy duro a ese estilo). Será que me acostumbré a escucharlo, pues lo tenía en mi reproductor de mp3 y lo escuché durante todo un mes, en camino hacia el trabajo, provocando esto que las composiciones se me adhiriesen al cerebro. No lo sé, jamás sabré por qué le tengo tanto aprecio a esta placa. En definitiva, se trata de un disco más que correcto, sin nada que no haya sido hecho cientos de veces por otros grupos. Pero la banda nacida de las cenizas de Putrilage me compró en su momento, y hoy me sigue resultando entretenido escuchar este “Incinerate The Vanquished”. Tan entretenido me resulta, que hoy, casi 8 años después, sigo esperando el segundo disco.


No hay comentarios: