viernes, 9 de noviembre de 2012

Electric Taurus - Veneralia


Año: 2012
Sello: Moonlight Records
País de origen: Irlanda

En donde dice País de origen, debería decir Irlanda/Argentina. ¿Por qué? Porque el baterista del grupo es Mauro Frison, quien fuera baterista de bandas como Warbreed y Embodiment, entre otros. Si estás al tanto de lo que sucedió/sucede en la movida Extrema en Argentina, es más que probable que hayas escuchado a esas 2 bandas. Bien, la cuestión es que hoy Mauro es, además de integrar Alternative 4 a la par del gran Duncan Patterson (sí, el ex Anathema y Antimatter), baterista de un trío irlandés que promete y mucho. Promete y concreta, para ser más exactos. ¿Cómo es esto? Prometen dar un salto en cualquier momento y llevarse todo puesto. Pero (siempre debe haber un pero ¿no?) me queda la sensación de que en algunas zapadas, el disco no les hace justicia. O sea, me queda la idea de que esas partes tan voladas y agradables, esos arreglos tan bien elegidos que meten en las zapadas, en vivo te destrozan el cráneo. Y concretan porque, cuando se van para el lado del Stoner y el Doom, sacan a relucir la chapa de músicos que la tienen muy clara. En especial en el track que abre el disco, "Mountains", el cual es, para mi, un pequeño clásico que contiene lo que más me gusta de ellos: garra, feeling, buen gusto y una precisión demoledora por parte de los intérpretes. En ese track me recuerdan a Night Horse. Pero, y en líneas generales, las influencias del grupo vienen por el lado de lo mejor de los 60/70 (Hendrix, Cream, Blue Cheer, Black Sabbath, Grand Funk), influencias típicas (Kyuss, Monster Magnet, Orange Goblin), más un interesante y más que personal manejo de los climas.
Tanto Mauro (un baterista que derrocha precisión), como Matt (guitarra y voz) y James (bajo) demuestran ser músicos competentes, inteligentes y seguros de sí mismos. Las pruebas están en este disco debut, el cual, seguramente, ya debe estar dando que hablar en el ámbito musical en el cual se mueven los Electric Taurus. De ser así (que la banda esté dando que hablar) la cosa, entonces, va como debe ir para ellos: realmente bien. Se lo merecen. 

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