Finntroll - Nifelvind

Año: 2010
Sello: Century Media
Formación:
Vreth - Vocals
Routa - Guitars
Skrymer - Guitars
Tundra - Bass
Trollhorn - Keyboards, Guitars
Virta - Keyboards
Beast Dominator - Drums

Año 2005. Partido de fútbol entre amigos. Rodrigao entre ellos. Tras el partido nos sentamos a tomar unas cervezas, y con Rodrigao empezamos a intercambiar cd´s. Tras cada encuentro futbolístico, una de las mesas del bar situado al lado de las canchas, se convertía en una especie de mercado persa en donde se intercambiaban cd´s, dvd´s, revistas, libros, etc. Recuerdo que antes de un partido, hablando por teléfono con Rodrigao, le comento que había escuchado un grupo finlandés llamado Finntroll y me había gustado mucho. La respuesta de Rodrigao no se hizo esperar: "boludo, tengo todos los discos; hoy te los llevo". Se hizo el intercambio y al llegar a casa puse uno de los discos de Finntroll, no recuerdo cual, pero me rompió la cabeza. Y así, hasta el día de hoy, los sigo casi incondicionalmente.  Por eso, cuando me recomendaron el último cd de los fineses, diciéndome que no defraudaba, me puse a buscarlo de inmediato. Y tras unos meses escuchandolo detenidamente (recién lo conseguí en diciembre del 2010) comprobé que las palabras de quien me lo recomendó, daban en el clavo: Finntroll no defrauda. Sin ninguna novedad en el frente, ellos tienen su estilo bien definido y se mueven dentro de determinados parámetros, modificando algunos puntos, algunos matices, con el propósito de mantener fresca la propuesta, buscando que el tiempo no haga mella en la misma, pero sin alejarse demasiado del estilo que vienen practicando desde aquel disco debút, editado hace ya 11 años atrás.
El Humppa Folk Metal es Finntroll, ellos son la esencia de un estilo tan singular como fresco, divertido y poderoso. Una forma de hacer y sentir la música que, al menos a mi, me resulta hipnótica, cautivante.
De seguro que el factor sorpresa hace rato desapareció. Hoy por hoy, Finntroll es un clásico, una banda de culto que hizo su camino al margen de las modas y tendencias. Y lo mejor es que mantienen la categoría intacta, sin dejar que los cambios de formación, suicidios de integrantes, enfermedades, y demás situaciones complicadas que harían que una banda se separe, afecten la carrera y el talento del grupo. La calidad está intacta, la fiesta sigue su rumbo, y yo me voy a descorchar un vino en honor a Finntroll.