Año: 2016
Sello: Avantgarde Music
País de origen: Canadá
Editado a fines del año pasado, el tercer EP de los canadienses Panzerfaust (séptima grabación si contamos todos sus discos) es de esa clase de trabajos que tienen todo para deslumbrar, pero que, por alguna extraña razón, se queda cerca de lograrlo. Es decir, todo pareciera indicar que estamos ante un gran disco: el sonido, las canciones, las interpretaciones, el arte gráfico. Todo cierra, como si no hubiera fallas en la obra en cuestión. Entonces, si sucede todo eso alrededor del combo canadiense ¿por qué "The Lucifer Principle" no logra romperme la cabeza? Voy a tratar de explicarlo.
Las piezas están en su lugar, estos tipos sí que saben cómo tocar Black Metal moderno, pero sin perder de vista la esencia del estilo. No temen jugar con las texturas, tienen elementos que les permiten redondear formas sumamente atractivas para el oído deseoso de buena música -extrema- y logran darle a cada pista un aire entre oscuro y bélico que potencia a la música del grupo. Mas, cuando uno espera que exploten todo su potencial y alcancen el siguiente nivel, tanto creativo como interpretativo, la banda se acomoda en su lugar y te deja con las ganas de disfrutar de tal salto cualitativo. Lo peor del caso es que les sobra capacidad como para hacerlo. Suenan tan compactos, tan poderosos y enfermizos, que es cuasi imposible no encontrar algún encanto particular en la música de la banda de Ontario. Si hasta hay audacia en ciertas decisiones, como la de hacer un cover de Johnny Cash ("God's Gonna Cut You Down") en una versión que no se limita a reproducir la original, ni haciéndola en la remanida forma de blacker ortodoxo que todo lo pasa por su filtro, y que ha arruinado muchas canciones hermosas.
Le sumemos el estupendo manejo de las disonancias (la primera pista es un claro ejemplo de ello), el cuidado tratamiento de las atmósferas, y el filo Industrial con el cual cortan ciertas partes y que usan para introducir sonidos asfixiantes y romper moldes, todos aspectos que me obligan a decir lo siguiente: estos tipos son buenos en lo suyo. Pero, hay un pequeño gran detalle: olvidaron hacer grandes canciones. Sí, olvidaron ESE detalle, para nada menor. Es por eso que al final del disco, uno se queda con la sensación de que con un poquito más de magia, "The Lucifer Principle" hubiera sido fabuloso. Se quedó en lo que es, un buen disco y nada más que eso. ¿Te parece poco? Hay millones de bandas dando asco de forma escandalosa, editando discos que merecerían ser borrados de la faz de la Tierra. ¿Vamos a aniquilar a Panzerfaust por no haber hecho de su nuevo opus lo que éste insinúa? Claro que no. De hecho, y más allá de quedarme con las ganas de más, yo también lo disfruté bastante.
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