Año: 2015
Sello: Old
Temple/Third Eye Temple/Hellthrasher Productions
País de
origen: Polonia
Bien, el año recién comienza, y ya tenemos unos cuantos
discos alucinantes como para ir perdiendo la cabeza. Si así comienza el año, no
quiero ni imaginar lo que nos depara el 2015 en materia de música dura! Y aquí
tenemos, justamente, a uno de los discos que más he esperado en estos últimos
años, y uno de los candidatos a figurar en el Top 10 del 2015: el segundo disco
full de Embrional, creadores de esa animalada llamada “Absolutely Anti-Human
Behaviors”. Ese disco, el primero en la carrera de la banda, tras 2 Demos y un
Split -con Empheris-, fue una soberbia e inhumana muestra de lo que es el Infierno en sí
mismo; fue como si alguien hubiese abierto las Puertas del Infierno, y nos
hubiese permitido ver lo que sucedía allí dentro. “The Devil Inside” es el
Infierno en sí mismo, y ya no vemos lo que allí sucede desde lejos: lo vivimos
en carne propia. Sí, así de violento, caliente, enfermizo y complejo es este
segundo álbum de una banda que asomó como una gran promesa, y que hoy es una
realidad monstruosa. Joder! Que estos tipos son realmente buenos en lo suyo!
Saben como tomar cada una de las partes que conforman el todo, saben como
manipular cada átomo, y transformarlo en un ser viviente gigantesco, poderoso,
y nuevamente, inhumano. Saben cómo ser violentos. Saben cuándo pisar el
acelerador a fondo. Saben cuando meter un rebaje, y cómo hacerlo. Saben cuándo
apelar a la simpleza y cuándo transformarse en un andamiaje complejo y retorcido,
intrincado hasta enloquecer al oyente. Y por sobre todas las cosas, saben
cuándo permitir que la oscuridad avance hasta ennegrecerlo todo: siempre. Sí,
en “The Devil Inside” la luz es algo lejano y obsoleto, un recuerdo vago de
algo que yace muerto. “The Devil Inside” es una blasfemia pensada con frialdad
de asesino, y perpetrada con la violencia de ese mismo asesino cuando decide
apagar su mente y dedicarse a la acción. Es un disco furioso y malvado, un
escupitajo de sangre pútrida en la cara del Cristianismo. De lo contrario, de
no ser eso que digo que es, no hubieran creado canciones enormes como la que da
nombre al disco, “Evil's Mucus”, “910”
(mi favorita por ser la más variada y compleja, y porque aquí la violencia es
insoportablemente adictiva) y “Whore, Drugs & Brain Dead”, una profanación
sonora en estado puro. Y así, así como esas 4 muestras que extraje para
ejemplificar lo que es este disco, así podría haber elegido a cualquiera de las
canciones que integran el nuevo y colosal disco de una banda que vino al mundo
para ganarse un lugar de privilegio entre las huestes del más impío Metal
Extremo: Embrional, los responsables de uno de los discos que ya, a tan sólo 2
meses de haber comenzado el año, se auto-postula como uno de los mejores discos
del 2015.
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