Año: 2014
Sello: Mother Fuzzer Records
País de origen: Italia
Mother Fuzzer Records siempre nos aporta buen material
rockero; ya sea Stoner, Hard Rock o simplemente Rock, este sello nos envía
material que ayuda a darle (mucha) variedad a nuestro blog. En este caso nos
llega el disco de este grupo formado en el año 2011, en Milán, Italia. Black
Bear hacen Hard Rock, y lo hacen realmente bien. Ya desde el nombre del disco,
pasando por la portada, uno puede ir dándose una idea de por dónde viene la
cosa. Hard Rock de sonido robusto, con riffs de guitarra muy rockeros, una base
contundente pero plagada de sutilezas, y un cantante que apela a la melodía
para darle mayor variedad al estilo compositivo del grupo. Con claras
influencias del Hard Rock de los 70s, más toques de los 80s en algunos yeites
guitarreros, el disco debut de Black Bear es un álbum agradable y poderoso a la
vez. Carente de sorpresas, los italianos se limitan a transitar por caminos ya
conocidos por todos, pero apoyándose sobre bases que le dan color y energía al
material de la banda. Estribillos pegadizos, riffs de guitarra que suenan a
“esto ya lo escuché antes”, pero que encajan a la perfección con el estilo del
grupo, y que, además, están muy bien tocados, y composiciones que si bien no se
salen del molde convencional del Hard Rock (ya saben, estrofa-estribillo, o
bien, estrofa-puente-estribillo, con sus repeticiones correspondientes),
reciben el tratamiento correcto para que todas las canciones resulten muy
entretenidas, y que, en líneas generales, “Rock From The Woods” sea un álbum
que merezca ser escuchado completo y a todo volumen.
En un panorama general muy homogéneo, sobresale esa gran
canción llamada “Dancefloor On Fire”, lo más poderoso y logrado del disco, con
una banda prendida fuego y rockeando en ese estado. Las demás canciones nos
muestran a un grupo que sabe qué quiere, y que sabe cómo hacerlo, sin
deslumbrar, pero invitando a destapar una cerveza bien fría y beberla con
amigos mientras suena el debut discográfico de Black Bear, un disco de Hard
Rock con toques sureños que abre el camino para que estos oriundos de Milán
sigan demostrando que, si hablamos de Rockear, Black Bear no tienen nada que
envidiarle a nadie.
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