Año: 2014
Sello: Hammerheart Records
País de origen: Holanda
Sammath es Jan Kruitwagen y viceversa. Él es el creador del
grupo, el único compositor y, por si esto fuera poco, se encarga –al menos en
este disco- de tocar la guitarra, el bajo y además canta. Lo que se dice, Jan
es el alma y cerebro del grupo. Para esta placa unió fuerzas con Koos Bos
(batería) y Ruud Nillesen (bajo), con quienes perpetra este atentado sonoro.
Black Metal, sin rodeos, lleno de odio, misantropía y espíritu bélico. Sammath
tiene cosas que, por instantes, me recuerdan a Gorgoroth, por otros a
Beherit, cosas que recuerdan a Marduk, todo mezclado y pasado por el filtro
de Sammath (o de Kruitwagen, que es lo mismo), dando como resultado un Black
Metal achicharrante, que despide olor a cuerpos incinerados. Todo aquí es muy
violento, sin atisbos de melodía ni intentos por sonar complejos o refinados.
Esto es Black Metal presentado en su forma más brutal e inhumana, como si se
tratase de un bombardeo, con canciones que dibujan cruentas imágenes en el
cerebro del oyente, imágenes de cuerpos destrozados, ciudades en ruinas, olor a
pólvora a granel y destrucción a raudales.
Teniendo en cuenta estas cualidades, deberíamos estar ante
un gran disco de Black Metal, o al menos, un disco de esos que entusiasman
mucho. No es así. “Godless Arrogante” es un buen disco, ideal para los amantes
del lado más brutal del Black Metal, con toques de furibundo Death Metal
introducidos ocasionalmente en partes puntuales, y hasta algún riff thrasher
tocado de forma bestial. Pero la monotonía imperante impide que este nuevo opus
de la banda de J. Kruitwagen sea una obra descomunal. Es un álbum aplastante,
feroz y caótico, eso no se discute. Pero existe una tendencia a la repetición
que hace que el quinto full lenght de Sammath sea un disco al que le sobran
algunos minutos.
Eso sí, si lo que buscas es un grupo con un sonido
atronador, composiciones que destilen odio a mansalva, y toda la negatividad
inherente al más impío Black Metal, acá hay todo eso, y en cantidades
industriales. Sólo para fans del Black más mala onda y minimalista.
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