Año: 2013
Sello: Dark
Descent Records
País de
origen: USA
Y un día,
Imprecation editó su primer disco full. Tras 3 demos, 2 Eps y un compilado (el
genial Theurgia Goetia Summa), la
legendaria banda texana nos regala su primer álbum full, y confirma todo lo que
siempre pensamos aquellos que les hemos rendido culto desde los 90s hasta la
fecha: que no sólo son una gran banda, sino que siempre fueron infravalorados
de manera totalmente injusta. Sinceramente, no puedo entender como grupos que
han perdido el rumbo hace rato, u otros que apoyan su propuesta en artilugios
publicitarios, imagen y actitudes exageradas, pueden obtener mayor
reconocimiento que estos verdaderos Dioses del Death Metal. Imprecation no es
una banda fácil de digerir, lo sé. Ni siquiera es un grupo que vaya a ser del
agrado de todos los fans del Death Metal. Pero, joder, éstos tipos le rompen el
culo a todos los jodidos shredders que hoy invaden el mundo del Death Metal, y le
patean los dientes a todos esos payasos que piensan que hacer el rol de
psicópatas brutales los va a convertir en los nuevos grandes del género, y se
cogen de parado y en seco a la mayoría de los grupos que cuentan con el apoyo
de grandes sellos discográficos. Es así de simple: Imprecation se merecen más
de lo que han obtenido. Y este estupendo álbum no hace otra cosa que afirmar y
confirmar todo lo que dije antes. “Satanae
Tenebris Infinita” es una verdadera obra maestra del Death Metal más
pesado, arrastrado, mala onda y endiablado. Es un disco feroz en todos los
aspectos, en todas las direcciones. Ya sea cuando pisan el acelerador, ya sea cuando
deciden ir lento como una babosa, ya sea cuando meten cosas del Black más
primitivo a la Von ,
los Imprecation aciertan, una y otra y otra vez. En esta joya no hay un solo
tema de relleno, ni una sola parte que esté de más. Rubén Elizondo (batería y
teclados), Dave Herrera (voz), Archfiend
y Moon (guitarras) y Cerberus (bajo) se plantan con firmeza, y dicen
“esto es lo que somos, esto es lo que hacemos: lo tomas o lo dejas. Mas no esperes
que cambiemos para complacerte”. Y con esa actitud beligerante y malvada,
desatan un infierno sonoro que podría servir de banda sonora para un ritual
ocultista, o bien para musicalizar un Apocalipsis bíblico. Más que tocar sus
canciones, las escupen con furia y demencia, y lo hacen dejando el alma en cada
puta canción. Tal como lo vienen haciendo desde aquel oscuro demo del 92, el
crudo y perverso Ceremony Of The Nine
Angles, así siguen tocando los Imprecation. Así, sin cambiar más que lo
justo y necesario como para que su música siga sonando actual, vigente, así se
mantienen éstos brutos. Se mantienen fieles a sí mismos, que es lo mismo que
decir que son fieles al Death Metal. Al fin y al cabo, ellos son Death Metal,
lo viven, lo sienten, lo aman. A tal punto llega la fidelidad de estos tipos a
nuestro amado Death Metal, que el disco fue editado por Dark Descent Records,
el sello de los enormes Sadistic Intent. El círculo perfecto ¿no?
2 comentarios:
como putas podes sonar duro aun siendo lento ? no importa si vas a 80 o 240 , dan justo en el clavo , suena lindo tal como me gusta...Gran disco
att:
Pervertido
Estoy totalmente de acuerdo contigo. Saludos
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